Durante los cuarentaiseis años que duró la Guerra Fría (1945-1991), el mundo de la política y los negocios estaba circunscrito a las áreas que controlaba por un lado Estados Unidos y por otro la Unión Soviética. La culminación de esta confrontación política y militar en 1991, dio paso a la globalización que se caracterizó precisamente abrir los mercados del mundo.
Se trató de una nueva situación que había que plantearla como de mayores oportunidades para los negocios internacionales. En el Perú, nuestro sistema educativo y universitario venía reproduciendo por generaciones conceptos errados por carecer de una visión geopolítica. Dentro de esos errores cuando se hablaba de los límites del Perú, incluso en documentos y mapas oficiales hasta ahora se suele decir que el Perú por el Oeste limita con el Océano Pacífico. Este es un gravísimo error porque el mar es visto como un límite y por lo tanto como que si no nos perteneciera y no se considera al mar como un espacio de proyección. Ello explica por qué las políticas públicas de los gobiernos siempre estuvieron de espaldas al mar.
Actualmente la geopolítica es una disciplina totalmente distinta a la que se conceptuó durante la Segunda Guerra Mundial, ahora se la define como aquella disciplina que enseña a valorar lo que un país es, y a proyectar al mundo lo que desde su interior puede producir. Desde esta perspectiva, y considerando que el Perú tenía que incorporarse al mundo globalizado, he venido planteando en libros y artículos que el Perú geopolíticamente hablando se debe definir como un país marítimo, andino, amazónico, bioceánico por la proyección internacional del río Amazonas y con presencia en la Antártida.
Una concepción de esta naturaleza permite reconocer que el Perú es una potencia geopolítica por su ubicación en el continente, ya que además estamos integrados a cuatro cuencas internacionales: la Cuenca del Pacífico donde se ubican más de cuarenta Estados entre continentales e insulares y donde viven más de mil seiscientos millones de habitantes que vienen a ser un gran mercado. Estamos vinculados a la Cuenca del Orinoco, a la Cuenca del Amazonas y a la Cuenca del Plata. De modo que, la geopolítica no está divorciada de los negocios internacionales ya que hoy el mundo se está organizando en bloques geoeconómicos como la Unión Europea, el Mercosur o la asociación de países que integran la Cuenca del Pacífico, que dicho sea de paso, hoy son las economías más sólidas y poderosas.
MAPA QUE DEMUESTRA EL VALOR GEOPOLÍTICO DEL PERÚ Y SU IMPORTANCIA EN LOS NEGOCIOS INTERNACIONALES