Al concluir la Segunda Guerra Mundial, la sangre de 55 millones de ciudadanos en su mayoría europeos, teñían y cubrían los campos de muerte además de ciudades destruidas en el viejo continente. Era 1945 y se iniciaba una etapa de reconstrucción, de pensar en el desarrollo y el bienestar de los que quedaban y en las nuevas generaciones que llegarían. Fue tarea de los líderes europeos sobrevivientes de la guerra más devastadora que conoció el mundo con el agregado de dos bombas atómicas explotadas en Hiroshima y Nagasaki ciudades del imperio japonés.
- Los líderes
Un grupo de líderes visionarios, admitieron que Europa no podía seguir siendo el escenario de las confrontaciones que por generaciones desde tiempos remotos se venían realizando. Estos líderes consideraron que se hacía necesario una Europa pacífica, unida y orientada a promover el desarrollo de sus pueblos. Entre esos líderes visionarios se encuentran: Konrad Adenauer, Joseph Bech, Winston Churchill, Alcide de Gaspareri, Jean Monnet, Paul-Henri Spaak y Antiero Spinelli.
- El inicio del cambio europeo 1945-1959
La voluntad de hacer de Europa una zona de paz y desarrollo se inició con la Conformación de la Comunidad Europea del Carbón y el Acero, dos elementos importantes en el desarrollo de las armas, a partir de esa fecha fueron orientadas a promover el desarrollo de sus respectivos países.
Esta primera agrupación la conformaron seis países: Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Lexemburgo y los Países Bajos. Los antiguos enemigos se daban la mano para desarrollar la industria en Europa. Sin embargo, la Guerra Fría también alcanzaba a Europa y la confrontación entre la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) y los Estados Unidos se produjo en Hungría que clamaba libertad frente a los soviéticos, movimiento que fue aplastado militarmente por la ex URSS.
A pesar de estas dificultades, en 1957 se da el segundo paso en la conformación de la Unión Europea, puesto que se logró crear la Comunidad Económica Europea (CEE) o mercado común.
- Incremento de los primeros países europeos 1970-1979
En 1973 se producen tres incorporaciones más: Dinamarca, Irlanda y el Reino Unido con los que la Unión Europea llega a nueve miembros. Es también el momento en el que finalizan dos dictaduras de derecha en Europa, la de Antonio de Oliveira Salazar en 1974, quien no pudo resistir las huelgas obreras a pesar de la represión que desató; y el segundo caso, fue la muerte del general Francisco Franco en España en 1975. Es el momento en el que la Unión Europea empieza a realizar grandes inversiones en infraestructura y crear miles de puestos de trabajo. Otro cambio importante se dio con la elección del Parlamento Europeo, recurriendo por primera vez al sufragio universal.
- La caída del muro de Berlín
En 1981 se produce el ingreso de Grecia como integrante de la Unión Europea, al que se añaden cinco años después, España y Portugal. Un cambio beneficioso para la población europea se produce en 1986, cuando se aprueba la eliminación de las trabas para la libre circulación de mercaderías a través de las fronteras, hecho que da pie a un cambio significativo en la noción de la soberanía del Estado tradicional, ya que a partir de esa fecha no existen barreras fronterizas que facilitan la aparición del “mercado único” europeo. Culmina este período de cambios, eliminando las soberanías fronterizas y dando pie a una flexibilización de los conceptos originales de soberanía que se instalaron en la Paz de Westfalia de 1648. Estos cambios fueron cerrados en 1989 con la caída del Muro de Berlín y la integración de los dos Alemanias; y fueron el anuncio de lo que ocurriría dos años después en 1991 con la desintegración de la URSS.
Nuevos aires de integración comenzarán a acentuarse a partir de estos hechos.
- Eliminación de las fronteras y los beneficios sociales
Con los hechos enumerados en el párrafo anterior, la Unión Europea sigue avanzando y aplicando un criterio igualitario entre todos sus miembros, de ese modo se aprueban las famosas “cuatro libertades de circulación”: mercaderías, servicios, personas y capitales; estos acontecimientos se producen en 1993 con la firma de los tratados de Maastricht (1993) y el de Amsterdam (1999).
Mientras tanto, en 1995 se había producido el ingreso de tres países más a la unión: Austria, Finlandia y Suecia. La libertad del libre tránsito de las personas entre todos los países de la Unión Europea se vio fortalecido con los acuerdos de Schengen, por el cual el ciudadano se puede desplazar entre los países sin necesidad de presentar su pasaporte en las fronteras. Adicionalmente, millones de jóvenes inician estudios en cualquier país de la unión, la comunicación se hace más fluida porque hay más acceso a la telefonía móvil y a Internet. Se introduce entre las preocupaciones de los integrantes de la Unión Europea los problemas del cambio climático y los temas de seguridad y defensa.
- La aparición del Euro, el Parlamento Europeo, la bandera y el himno
El Euro es la moneda oficial que ha significado la consolidación de lazos económicos entre los países integrantes de la unión. El Euro es la moneda de 19 de los 27 países que integran actualmente la Unión Europea, apareció por primera vez el 1 de enero de 1999. La denominación de euro zona, o zona del euro obedece al uso como moneda oficial de los 19 Estados, formando una unión monetaria.
Otro de los aspectos que se constituyó un logro y que ahora sale a relucir como parte del origen de la crisis, fue la creación y el funcionamiento de un órgano regulador y normativo, el Parlamento Europeo; sus acuerdos tienen carácter vinculante para todos sus miembros. En el nuevo esquema que inauguró la Unión Europea, este concepto para algunos dirigentes del viejo orden, implicaba una lesión de su soberanía porque ahora tienen que regirse por los acuerdos del parlamento.
Otros hechos de carácter social que seguían lesionando a los tradicionalistas y que fueron tomando cuerpo silenciosamente, fue la creación de la bandera y el himno de la Unión Europea. También se dieron fuertes resistencias para aceptar la creación de una Constitución única, tema que fue postergado, porque a renglón seguido, los tradicionalistas se plantearon las preocupaciones sobre qué ocurrirían con las identidades nacionales.
Por estas consideraciones no resultó extraño ni fuera de lugar que los que promovieron el retiro del Reino Unido de la Unión Europea, expresaran: “por fin recuperaremos nuestra soberanía”, «Queremos estar a cargo de nuestro propio país, nuestro propio dinero, nuestras propias fronteras, y nuestra propia política de inmigración». A la que se sumó el candidato norteamericano Donald Trump, cuando manifestó que los ingleses recuperaron su autonomía.
- El retiro del Reino Unido y la crisis tras el Brexit
Por los antecedentes que acabamos de resumir, el retiro del Reino Unido de la Unión Europea, no es únicamente de implicancias económicas, donde las primeras víctimas y los mercados han expresado su desconcierto y sorpresa.
Geopolíticamente significa una pugna generacional, entre jóvenes que tienen otra forma de ver el rol del Estado en sus procesos de integración con otros similares y quienes no pueden desarraigarse de las visiones de la soberanía geográfica y estatal. Por eso la frase que han repetido en los últimos días los jóvenes ingleses después de la derrota por permanecer en la unión ha sido: “Nos han robado el futuro” o aquella otra, “Me resulta incomprensible que la gente haya decidido arrebatar el futuro de mi generación”. Son los jóvenes los que votaron abrumadoramente por permanecer en la unión.
Según encuestadoras británicas los jóvenes entre los 25 y los 34 años votaron a favor de permanecer en cambio los mayores de 45 años votaron por el Brexit. Para los jóvenes ingleses esta ruptura con la Unión Europea les está ya significando perder la oportunidad de estudiar en otros países de la unión, perder sus trabajos que se estima inicialmente que afectará a 820,000 jóvenes que perderán sus trabajos.
Sobre la crisis de separación la lideresa Ángela Merkel ha dicho: “Lamento la decisión británica, pero la Unión Europea es lo suficientemente fuerte para encontrar respuestas adecuadas al reto de hoy”.
Así está Europa, agobiada por la separación de un socio importante que no estuvo totalmente sujeto a las directivas de la Unión Europea, puesto que no formaba parte de la zona euro ni mucho menos utilizaban el euro como moneda oficial. (JRCC).